Caliente la parrilla asegurándose de que la temperatura sea alta. Abra las pechugas y rellénelas con los tomates, la albahaca, los champiñones y el queso. Ciérrelas con unos palillos. Salpimentelas y cúbralas con el aceite y el zumo de limón, dejándolas marinar por 20 minutos.
Ponga las pechugas sobre la parrilla caliente y aselas con calor directo de 4 a 6 minutos por cada lado. Las pechugas estarán listas cuando se vean consistentes. Retírelas y déjelas reposar.
Retire los palillos antes de servir las pechugas y córtelas en rebanadas. Ofrézcalas inmediatamente.