350 gr. de chinchulines.
Sal y pimienta.
Aceite.
Cerciorarse de que los chinchulines estén bien lavados. Córtelos en trozos de 8 a 10 centimetros. Llélvelos a la parrilla caliente. Sazónelos con sal y amplia cantidad de pimienta. Rociarlos con aceite para su mejor cocción.
Hay que verificar el calor de las brasas y dar la vuelta a los chinchulines constantemente, para evitar que se quemen y endurezcan. Si desea, al momento de servir se le puede agregar más pimienta.